Glasgow Rangers 2-2 Olympique Marsella 1992/93

De CARTELES

De 1992/1993

Rangers v Marsella 1992/93
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0-1 Boksic (m30)
0-2 Vöeller (m56)
1-2 McSwegan (M78)
2-2 Hateley (m83)

De 1992/1993

Miercoles 25 Noviembre 1992
Champions League Grupo A
GLASGOW RANGERS:
Goran ,Murray , Roberton , Gough (Pressley m46) McPherson , Brown , (Mc Swegan m61) Steve McCall , Durrant , Hateley y Mikhailichenko.
OLYMPIQUE MARSEILLE
Barthez , Casoni , Anglomá , Boli , Desailly , Sauzze , Pelé , Vöeller , (Eydelie m89) y Boksic (Durand m83)

Increíble reacción del Rangers le valió para. erpatar un partido que parecía tener irremisiblemente perdido ante un Olympique superior. Los franceses, que dominaban el juego y el marcador por 0-2 a los 78 minu tos, acabaron cediendo tablas ante la feroz ofensiva del equipo escocés. El Rangers no tuvo grandes virtudes futbo lísticas, pero la raza le permitió evitar un KO. que hubiera comprometido demasiado su futuro en la competición.lbrox Park presentaba un aspecto lamentable tras la lluvia caída durante dos horas, antes del inicio del encuentro. El OM se adaptó mejor y dominó la primera parte de cabo a rabo. El Rangers, sin su figura McCoist, cedió el centro del campo y no pudo superar en ningún momento a una defensa muy bien colocada, en la que Casoni cortaba cualquier inten to escocés de acercarse a la portería defendida por el joven Barthez. Unicamente el ucraniano Mikhailichenko estuvo a punto de marcar para los Rangers. En cambio, el ataque del Olympique sí que se mostró inspirado en sus incursiones ofensivas. Rudi Voeller llevó de cabeza a toda la defensa bri táriica. El delantero alemán dio en bandeja el primer gol mar sellés, rematado por Allen Boksic, después de regatear a dos jugadores rivales. Al final de la primera parte, el público dedi có un sonoro abucheo a su equipo, que se tomó en mutismo total cuando Voeller, a los 56 minutos, anotó un 0-2 que parecía definitivo. Pero los escoceses no se rindieron y a base de corazón pusieron cerco al rival. Aupados por un público que olió el milagro, los del Rangers dispusieron una ofensiva a por todo o nada. La reacción se inició con el gol del joven McSwegan a los 78 minutos y culminó, entre el proxismo general, con el gol de Hateley, apenas cinco después. El Marsella vio y no creyó lo que se le vino encirha y la Copa de Euro pa recuperó toda su magia. Doce minutos del Rangers igua laron 78 del O.M. El gran fútbol es así. Afortunadamente.

De 1992/1993

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